Reciclar es transformar el desperdicio en materia prima para nuevos productos. Por ejemplo, con cuatro cajas de cereales equivale a un libro; 40 botellas plástica a un impermeable, 80 lata de refrescos al rin una bicicleta.
Con la recolección y clasificación de materiales que pueden ser reciclados se disminuye el consumo de energía. Asimismo, consumir menos combustible fósiles se generará menos CO2. Por tanto, habrá menos lluvia ácida y se reducirá el efecto invernadero.
Por resultado, el reciclaje se convierte en una actividad gratificante que se puede impulsar en el hogar e incluso participar niños pequeños. Además, genera empleos e ingresos económicos.
¡Se necesita voluntad!
En Venezuela el reciclaje apenas llega al 15%. Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) 43,17% de los 335 municipios del país coloca los residuos en botaderos, 18,35% en vertederos y 38,49% lo coloca en rellenos sanitarios.
Para impulsar una cultura de reciclaje se necesita voluntad, tanto de la población como del gobierno, y asumir el compromiso para lograr un desarrollo sostenible y sustentable en el país.
En ese sentido, se debe iniciar con educar al respecto, promover la siembra de árboles, limpieza de playas y ríos. Igualmente, se fomentar el reciclaje en las comunidades facilitando la infraestructura para cumplir el ciclo del reciclaje.
Vía: El Informador