La «pareidolia», es un fenómeno psicológico que consiste en reconocer patrones significativos (como caras) en información aleatoria.
No hace falta recibir mucha información o estímulos visuales para que descifremos un rostro. Unas marcas oscuras en la posición de los ojos y la boca ya es suficiente.
Este fenómeno tiene una explicación simple: el cerebro humano está «cableado» para reconocer rostros.
La pareidolia tiene sentido desde un punto de vista evolutivo, asegura el psicólogo Rob Jenkins, de la Universidad de York en Inglaterra, pues «si hay un rostro cerca, hay una mente cerca. Y eso significa que hay alguien que potencialmente puede causarte mucho bien o mucho daño”.
Vía: BBC Mundo