La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) presentó su informe “Panorama de la seguridad alimentaria y nutricional de América Latina y el Caribe 2020”, centrado en los países que sufren índices de malnutrición, sobrepeso infantil y retraso en el crecimiento.
Julio Berdegué, Representante Regional para América Latina y el Caribe de la FAO, aseguró que la pandemia del coronavirus ha afectado el ingreso de ciudadanos, estimando que 45,5 millones de personas caerán en pobreza y 28,5 millones en pobreza extrema en la región.
Durante la presentación, Julio Berdegué, Representante Regional de la FAO, espresó que es fundamental enfocar los esfuerzos de los países y canalizar recursos hacia las áreas rezagadas, con soluciones a la medida de cada uno de ellos.
Por otro lado, Berdegué indicó que actualmente “el hambre afecta a 13 millones de personas más que en 2014” y agregaron que “un 30% de la población sufre inseguridad alimentaria moderada o grave”.
En tal sentido y bajo la premisa de la necesidad de desarrollar acciones con enfoque territorial y de esta manera poder lograr las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el informe Panorama 2020 propone tres tipos de políticas. Una de ellas orientada a mejorar el acceso económico y promover una alimentación adecuada en los territorios rezagados. Son relevantes las de protección social, como los programas de trasferencias monetarias o en especie.
Además, el documento señala como mprescindibles las estrategias para mejorar la producción y el acceso físico a los alimentos que apunten a una alimentación adecuada. “Para ello es clave promover cadenas de valor sostenibles que tengan en cuenta la nutrición, fortalecer y expandir los programas de alimentación escolar y fomentar los circuitos cortos de comercialización”.
En América Latina y el Caribe, el fuerte golpe económico de la pandemia ha dejado a millones de familias con menos recursos para comprar alimentos nutritivos”, señaló Jean Gough, directora regional de UNICEF para América Latina y el Caribe. “No recibir una alimentación saludable entre los seis meses y dos años pone a los niños y niñas en riesgo de malnutrición. Para que puedan crecer sanos en tiempos de pandemia, es urgente asegurar la disponibilidad de alimentos saludables a precios asequibles”.
Señalaron que además de Venezuela, en esta situación se encuentran México y Haití.
“Venezuela se mantiene en los estándares y patrones de obesidad en un 25%, pero aumentó elevadamente a 31% de subalimentación”, aseveró Ricardo Rapallo, oficial de política de la FAO para América Latina y el Caribe.
El número de latinoamericanos que padecieron hambre en 2019 aumentó en 5,2 millones respecto a la cifra que se reportó en 2018, que fue de 42,5 millones, lo que implica un crecimiento del 12,2 % en doce meses.
«Se prevé que la pandemia también aumente todas las formas de malnutrición infantil, retraso del crecimiento, deficiencias de micronutrientes, sobrepeso y obesidad», agregó Anselm Hennis, director del Departamento de Enfermedades no Transmisibles y Salud Mental de la OPS.
La crisis económica que ha generado la pandemia supondrá, según estimaciones de Cepal, una recesión del 9,1 % en la región y un aumento de pobreza del 37,3 %.
El informe “Panorama de la seguridad alimentaria y nutricional en América Latina y el Caribe 2020”, fue elaborado por la FAO en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), Unicef y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).