En el cierre del año escolar, la Federación Venezolana de Maestros (FVM) alza su voz para denunciar las condiciones que enfrentan los docentes en el país, marcadas por suspensiones salariales injustificadas, infraestructuras escolares deterioradas y la urgencia de mejoras salariales.

Carmen Teresa Márquez, presidenta de la FVM, calificó el año escolar como «muy accidentado» debido a las «suspensiones masivas» de docentes por parte del Ministerio de Educación desde noviembre. «Está suspendiendo a los maestros así estén en el trabajo, porque está haciendo una ‘aceleración’ de nómina y sin ningún procedimiento administrativo ha suspendido a maestros y los ha dejado sin sueldo», denunció Márquez, estimando que «son más de 40.000 docentes» afectados por esta situación.

La presidenta de la FVM enfatizó que, en la mayoría de los casos, «los docentes están en sus escuelas, dando clases», pese a las suspensiones de sueldo.

Además de los problemas salariales, Márquez señaló el deterioro de las infraestructuras escolares como otro factor que afecta la calidad de la educación. «Muchas veces los profesores hacen su horario mosaico porque las escuelas no están en las condiciones para que los niños asistan todo el tiempo, no hay agua potable, muchas escuelas no tienen pocetas, electricidad, no es solamente por los salarios sino que las instituciones están en pésimo estado», explicó.

En este sentido, hizo un llamado al ministro de Educación: «Aprovecho la oportunidad de decirle al ministro de que ahorita que vienen las vacaciones les hagan mantenimiento a las escuelas para que podamos comenzar un año escolar diferente, 2026 diferente y con escuelas en buenas condiciones».

Márquez reconoció que el gobierno ha estado «arreglando algunas escuelas», pero subrayó que «son 26.000 escuelas en el país, son muchas escuelas y realmente deben preocuparse más, de manera de que cuando llegue septiembre, octubre y los niños tengan que presentarse, encuentren mejores infraestructuras». Apuntó a Fundaeduca como la institución responsable y enfatizó la importancia de la «colaboración de las comunidades» para mejorar la situación.

La presidenta de la FVM también se refirió a la necesidad de que los maestros complementen sus ingresos con «tareas dirigidas a los niños en sus casas porque tienen que buscar el vivir dignamente, ellos tienen un salario muy bajo».

Ante la proximidad del pago del bono vacacional, Márquez solicitó al Ministerio de Educación que se considere un aumento significativo. «Hemos solicitado al Ministerio de Educación a través de un comunicado que el bono vacacional que se aproxima, un ‘minicero’ bono vacacional porque se va a cobrar a base de un salario no en base a lo que percibe mensualmente, por eso tenemos que aumentar los salarios», argumentó.

Además, propuso que «de dos meses de guerra económica le dé un buen monto ahorita al salir de las vacaciones que serían equivalentes a 240$, ojalá y el ministro realmente estudie esa posibilidad, porque sino un maestro podría recibir solamente 1.000 Bs de bono vacacional».

La FVM espera que las autoridades tomen en cuenta sus demandas y se implementen medidas concretas para mejorar las condiciones laborales de los docentes y la calidad de la educación en Venezuela.

Vía: Mundo UR

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