Las fuertes precipitaciones caídas la tarde del sábado 19 de abril, obligó al despliegue de trabajadores y maquinaria de la línea amarilla para despejar vías de comunicación ocupadas por el arrastre de sedimentos y rocas ante el desborde de quebradas en cuatro de los nueve municipios del estado Lara.
Sobre las acciones de protección a la ciudadanía y como respuesta inmediata a las consecuencias dejadas por la vaguada que sorprendió el sábado a la entidad larense, el gobernador Adolfo Pereira precisó que no hubo reporte de daños a personas ni derrumbes de viviendas.
Explicó que la población de Río Claro en la parroquia Juares en el municipio Iribarren (Barquisimeto), fue atendida para la limpieza de la vialidad principal por el Instituto de Vialidad del estado Lara (Invilara) con el apoyo de la Alcaldía del Municipio Iribarren.
Desde el Puesto de Comando, ubicado en la Gobernación de Lara detalló que también en Cabudare hubo anegación en el centro del municipio Palavecino.
Sobre el municipio Crespo (Duaca) ubicado hacia el norte de la entidad habló que la quebrada El Toro sufrió una importante crecida ocasionando inundaciones.
Por otro lado, alertó a la ciudadanía que habita en el municipio Morán (El Tocuyo), más específicamente, en la parroquia La Candelaria (Guaitó), puesto que hubo deslizamiento en la vía rural que une a Humocaro Alto con la referida localidad parroquial.
“Sobre todo a los motorizados, hacemos un llamado a manejar con mucha prudencia” añadió Pereira.
Iniciaron los trabajos en la zona alta morandina buscando restituir por completo el paso en esa zona rural.
Aseguró Pereira que todo el sistema de Gestión de Riesgo se encuentra activado monitoreando el clima y las acciones de asistencia en cada territorio.
Vía: Últimas Noticias
