El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha anunciado progresos significativos en las negociaciones con El Salvador, que podrían conducir hacia la implementación de un programa de apoyo financiero que transforme las finanzas del país centroamericano.
Este avance se produce tras meses de discusiones entre una misión del FMI y las autoridades salvadoreñas, lideradas por el presidente Nayib Bukele.
A pesar de los desafíos, incluidos los riesgos asociados con la adopción del Bitcoin como moneda de curso legal en El Salvador, parece que ambas partes están dispuestas a encontrar un terreno común para avanzar en dichas negociaciones.
El informe del FMI, publicado el 6 de agosto, destaca la necesidad urgente de abordar los desequilibrios macroeconómicos del país. Según se informó, la misión del FMI enviada a El Salvador ha trabajado en estrecha colaboración con las autoridades gubernamentales para identificar las políticas que podrían ser respaldadas por un programa del Fondo, con el objetivo de fortalecer las finanzas públicas y mejorar la resiliencia económica a largo plazo.
Entre los principales acuerdos alcanzados se encuentra la intención de mejorar el balance primario del Producto Interno Bruto (PIB) en un plazo de tres años, para colocar la deuda pública en una senda sostenible.
Según la organización, la consolidación fiscal se logrará mediante un conjunto equilibrado de medidas, que incluirán la racionalización del gasto público y la protección de inversiones críticas en infraestructura y programas sociales.
Por otro lado, con respecto a Bitcoin, que ha sido el centro de la controversia entre el FMI y El Salvador desde que el país anunció su decisión de convertir a la criptomoneda en moneda de curso oficial, la organización indicó que, aunque sigue siendo un tema delicado, muchos de los riesgos que se temen con Bitcoin no se han materializado.
El FMI ha subrayado la necesidad de mejorar la transparencia para mitigar los riesgos financieros asociados con la criptomoneda. Asimismo, reconoció que, aunque muchos de los riesgos aún no se han materializado, es crucial establecer un marco regulatorio que proteja a los consumidores y garantice la estabilidad económica.
Estas declaraciones, según la opinión de varios expertos, sugieren que Bitcoin ya no es un obstáculo para lograr un acuerdo financiero con el FMI y que las partes han comenzado a limar asperezas sobre este asunto. Todo esto podría allanar el camino hacia un acuerdo más robusto entre el país y la organización financiera internacional de la Naciones Unidas.
Vía: news.bit2me