Conoce esta leyenda contada por los indígenas sobre nuestros ríos más importantes. Es una historia de amor indígena en donde cuenta que Caroní (azul) era una mujer y Orinoco (marrón) era un hombre, se enamoraron a primera vista; pero era de diferentes etnias por lo que hubo disputas entre sus grupos.
Una noche, decidieron sellar su amor y escaparse; el Océano Atlántico conmovido con tal acto de valor se los llevo con la corriente en una canoa y termino fusionándolos con el agua. Su transformación fue el equivalente de haberse casado.
Cuando Orinoco está sofocado de calor, Caroní le sopla el viento para refrescarlo y cuando Caroní tiene mucho frío entonces éste le procura calor. Se complementan, se respetan, se cuidan y se protegen, ambos se necesitan. Esta es la verdadera belleza de la naturaleza.
Este fenómeno tiene lugar en Ciudad Guayana y puedes observar que la diferente composición química de cada río, hace posible la separación entre el color de las aguas cuando se juntan, un verdadero espectáculo.
Fotografía: @djivzla
Texto: Noticia al Día