El estado Lara posee pequeños tesoros escondidos, uno de ellos es la imponente Cascada del Vino. Ubicada dentro del Parque Nacional Dinira y a 40 minutos del poblado de Barbacoas se encuentra esta cascada, cuyo nombre que se debe al color característico que posee. Es una caída de agua de 90 metros de altura y que se encuentra a 1.600 metros sobre el nivel del mar.
Si bien es destino turístico, debería tener mayor resonancia dados sus encantos. La Cascada del Vino convoca a un itinerario sensorial, está allí para mirarla largamente y dejarse cautivar por sus antojadizos matices de color. Posee una sonoridad que otorga esa procurada sensación de paz, y recibe a los bañistas que quieran calmar en sus aguas el calor. A esto se suman las áreas adyacentes con espacios apropiados para el descanso y la recreación. El parque dispone de baños, cafetín, estacionamiento y cabañas donde acampar. Es, pues, una buena opción de paseo para compartir con la familia y los amigos.
Desde Barquisimeto existen diversas vías de acceso que llevan a la Cascada del Vino. Una de ellas es saliendo de Barquisimeto: se toma la ruta a Carora, luego el desvío en Sabaneta hacia Agua Viva y después de San Pedro a Barbacoas. Otra forma de llegar es la ruta Panamericana, hacia Trujillo entrando por el Poblado de San Pedro, La Pastora y Jabón hasta llegar al pueblo de Barbacoas. Desde allí se puede llegar a la imponente cascada.
Vía: barquisimeto.com