Tras seis meses de inactividad, la Bolsa de Valores de Damasco volvió a operar este lunes 2 de junio, marcando un momento simbólico en el intento de Siria por reactivar su economía luego de casi 14 años de guerra civil y tras el derrocamiento de Bashar al-Assad.
El cierre del mercado bursátil sirio había ocurrido durante los días caóticos que precedieron a la caída del Gobierno de Bashar al-Assad, en medio de una ofensiva rebelde.
Ahora, con nuevos líderes al frente del país y señales de alivio internacional en las sanciones impuestas durante el gobierno de Al-Assad, el Ejecutivo busca atraer inversión privada y reconstruir su devastada infraestructura.

En el acto de reapertura, el ministro de Finanzas, Mohammed Yisr Barnieh, expresó optimismo sobre el rumbo económico del país. “La bolsa de valores operará como una empresa privada y servirá como un verdadero centro para el desarrollo económico de Siria, con un fuerte enfoque en lo digital”, declaró, según la agencia estatal Sana. También aseguró que el nuevo gobierno tiene como objetivo “facilitar las operaciones comerciales y abrir las puertas a prometedoras oportunidades de inversión”.
La reanudación de las operaciones bursátiles se da días después de la firma de un histórico acuerdo energético de 7.000 millones de dólares con un consorcio internacional liderado por Qatar, que incluye también empresas de Turquía y Estados Unidos. El proyecto contempla la construcción de cuatro turbinas de gas de ciclo combinado con una capacidad total de 4.000 megavatios y una planta solar adicional de 1.000 megavatios.
El consorcio está encabezado por UCC Concession Investments (Qatar), junto a Power International USA, Kalyon GES Enerji Yatirimlari y Cengiz Enerji de Turquía. Se trata del mayor anuncio de inversión extranjera en Siria desde que Estados Unidos, bajo la Presidencia de Donald Trump, levantó sorpresivamente una serie de sanciones el mes pasado.
Vía: France 24