La vicepresidenta de la República, Delcy Rodríguez y el ministro para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Remigio Ceballos afirmaron, en consonancia con el informe técnico del Cicpc y bomberos, que el incendio del almacén del IVSS, del pasado 15 de agosto, fue provocado por acción humana.
En rueda de prensa, los altos funcionarios del Ejecutivo informaron que por actuación del Cicpc, división de siniestros y cuerpo bomberos, el informe técnico determinó que se hallaron 5 focos de inmersión, de los cuales, se constató que 3 focos fueron accionados por llama directa. “De esta manera se descarta factor incidental si no que se requirió del factor humano”, dijo Ceballos.
Detalló que el fuego se propagó con rapidez, por las características de alta combustión del material que se almacenaba en el lugar y gracias a la rápida actuación del equipo se logró frenar la propagación mayor del incendio.
La vicepresidenta informó que serán repuestas las 132 unidades de hemodiálisis que corresponden a 7.500 personas que requieren el servicio. Afirmó que” a pesar del ataque criminal del IVSS, se garantizará la atención de los pacientes”.
De acuerdo a las autoridades, 132 máquinas se perdieron en el incendio, las cuales serán repuestas, tanto como los insumos. Asimismo dijo que el Ministerio para la Salud tenía el cronograma para terminar las obras de unidades de diálisis que serán entregadas en breve.
“Este incendio que fue planificado”, resaltó Rodríguez, quien afirma lo predicho por el gobierno el día 15 del probable “sabotaje”, como causa del siniestro.
“Reiteramos el llamado a la tranquilidad a los 7.500 pacientes, ya que los tratamientos del mes de agosto, han sido distribuidos y que existe reposición de todo lo que haga falta para el pueblo” .
También anunció que durante la tarde de este jueves, estará llegando a la nación un cargamento destinado a reponer los medicamentos perdidos durante el suceso, en el que se incluyen 134 nuevas máquinas para aumentar la capacidad de tratamiento en distintas partes del país.
Hizo un llamado a la «tranquilidad», asegurando que hay medicinas para continuar con los tratamientos de diálisis «sin perturbación».
