Ante el llamado por parte del Ejecutivo Nacional de iniciar las clases presenciales a partir del 25 de octubre en todos los niveles educativos, el presidente del Colegio de Profesores en el estado Lara Luis Arroyo, rechazó la orden emitida el fin de semana.

Arroyo indicó que no están dadas las condiciones para el regreso a clases presenciales, debido a que la infraestructura de las instituciones se encuentra afectada en un 90%.

«Las instituciones no cuentan con óptimas condiciones para recibir a estudiantes y profesores, los baños no existen, no hay agua, hay filtraciones, no hay capacidad para mantener una higiene adecuada en los planteles», denunció el profesor.

Asimismo, enfatizó que desde hace mucho no se realiza dotación a laboratorios, bibliotecas, no se entrega material didáctico a las instituciones y se descontinuó el Programa de Alimentación Escolar (PAE).

Señaló el representante gremial que tienen conocimiento de sólo el 20% de los docentes se han vacunado contra la COVID-19.

De igual manera hizo un llamado a los padres y representantes de esta situación y responsabilizan al Gobierno de lo que pueda ocurrir.

Manifestó Arroyo que los educadores devengan bajos sueldos y salarios, confirmando que desaparecieron los beneficios sociales, médicos y seguros de los docentes.

Hizo un llamado a los los trabajadores para que levanten actas donde constaten las condiciones de sus planteles.

«No podemos arriesgar la vida de ningún trabajador ni estudiante, no tenemos salud, pedimos que elaboren sus actas y alerten a los representantes de la situación tan crítica que existe», concluyó.

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