El 24 de diciembre se celebra en todo el mundo la Nochebuena, una festividad cristiana que conmemora la víspera en que nació Jesús.
La Nochebuena en pandemia nunca será olvidada. Cena frugal en muchos casos, pocos regalos, familia acotada al menor número de gente posible. La Navidad en tiempos difíciles siempre fue compleja en la historia.
Para las miles de familias a las que el coronavirus arrancó a un ser querido, para los miles de seres que perdieron amigos y compañeros de trabajo, esta fiesta será un trago amargo que siempre evocará la ausencia.
La economía contraída y la pérdida de empleos ya vino imponiendo dificultades. Pocos regalos y presupuestos más cortos; una cena que tiene más de compartir que del derroche de platillos costosos.
Existen una serie de símbolos y costumbres que suelen acompañar a la Nochebuena. Uno de los más populares es la misa de gallo o misa de los pastores, la cual tiene una duración de 2 horas y termina exactamente a media noche, para celebrar el nacimiento del niño Dios. Hoy en muchos países se celebrará antes del atardecer por el confinamiento de la pandemia.
Aunque actualmente el eje central de la Nochebuena, es el nacimiento del hijo de Dios, no todos los cristianos celebran esta festividad, porque consideran que tiene su origen en fiestas paganas y a decir verdad, hay muchas festividades antiguas que giraban en torno al 24 de diciembre, principalmente porque se trata del día en que resurge el sol durante los meses de invierno, exactamente 3 días después del solsticio de invierno que es el 21 del mismo mes.
Los primeros orígenes de esta festividad se remontan a Egipto y al Dios Ra. Luego tenemos que en la antigua Grecia justo en esa fecha se realizaban las ceremonias y culto al Dios Apolo, haciendo que todo el epicentro de la celebración girase en torno al oráculo de Delfos, principal templo erigido y consagrado a ese Dios.
Por último y poco antes del surgimiento del cristianismo, esta era la fecha para la celebración de las Saturnales, unas festividades romanas en honor a Dios Saturno, donde las personas degustaban de un sabroso y abundante banquete e intercambiaban regalos.
A lo largo de los años se han sumado más y más símbolos a esta festividad, pero los que han trascendido en el tiempo son los siguientes:
- El nacimiento: Se trata de una representación en miniatura de una ciudad en cuyo centro se encuentra el pesebre en que nació Jesús. Puede ser tan amplia o pequeña como lo desee el que lo construya.
- El árbol de navidad: Lugar idóneo para colocar los regalos y llenar de color y alegría el recinto principal de la vivienda.
- Papá Noel: Aunque se trata de una tradición más nórdica, muchos niños le escriben año tras año a este señor de traje rojo y rostro alegre, cartas para que les traiga el regalo deseado.
- El niño Jesús: En muchos países latinos y de tradición cristiana, el personaje que trae los regalos es este pequeño niño recién nacido, representando la esperanza de un nuevo comienzo.
- La flor de nochebuena: Conocida también como flor de navidad o flor de Pascua (pascuero), tiende a decorar muchos hogares durante esta velada.
¡Noticias251 les desea una Feliz Nochebuena!