Es un tipo de pan con el que se puedes hacer muchos platos de la gastronomía árabe. Sirve de acompañante, como bocadillo o para mojar en salsas. Es muy sencillo de hacer y se conserva suave por mucho tiempo.

Ingredientes:

 

  • 30 g levadura
  • 1 cucharadita de azúcar
  • ¼ de taza de agua tibia
  • 500 g harina de fuerza
  • 10 g sal
  • 1 y ¾ de tazas de agua tibia

 

Preparación:

1-Colocar la levadura, el azúcar y un poco de agua en un recipiente y dejar reposar durante 5 minutos.

2-Poner la harina en otro recipiente más grande y hacer una especie de hueco.

3-Agregar la mezcla con la levadura, la sal, el aceite y el resto del agua.

4-Amasar con la mano hasta que se forme una masa compacta.

5-Extender la masa en una superficie bien enharinada y amasarla hasta que quede fina y elástica al tacto.

6-Colocar la masa en una bandeja, taparla con un trapo de cocina y dejarla reposar hasta que duplique su volumen, una hora aproximadamente.

7-Precalentar el horno a 250 °C o 480 °F, 5 minutos antes de que termine el tiempo de reposo.

8-Tomar la masa y presionarla con el puño de la mano para extraerle el aire.

9-Dividir la masa en 12 porciones iguales, dejar reposar las porciones por 15 minutos más.

10-Estirar cada uno con la ayuda de un rodillo y formar círculos de 5 mm de grosor.

11-Colocar en bandejas de horno engrasadas con un poquito de aceite y llevarlas al horno por diez minutos.

12-Sacar los panes del horno, meter inmediatamente entre dos paños de cocina para que tome humedad y no se ponga duros.

13-Esperar a que se atemperen y ya están listos para consumir.

Vía: Notitarde

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