La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) ratificó su solidaridad con la población merideña, en particular con los habitantes del Valle de Mocotíes afectados por las lluvias de los últimos días.
«El dolor causado por la tragedia de causa natural, lo compartimos y lo hacemos nuestro en toda Venezuela», explica un comunicado difundido por la Iglesia.
Señala el escrito que gracias a la respuesta inmediata de tantas personas de buena voluntad se ha podido brinda ayuda desde medicina, alimentos, ropa y otros insumos.
En el texto indica «Lamentamos y reprobamos la actitud de algunas autoridades civiles así como de la Guardia Nacional Bolivariana quienes han impedido el acceso de gran parte de la ayuda enviada desde diversas partes del país, sino que han tenido una actitud de displicencia y ofensa hacia los miembros de la iglesia y de otras instituciones». Exhortan a cambiar de actitud para que los envíos lleguen pronto a su destino.
Agrega que Cáritas junto a diversas Cáritas diocesanas han realizado una rápida acción para recolectar el apoyo llegado de distintas partes del país.