Más de 170 privadas de libertad del anexo femenino de la Comunidad Penitenciaria Fénix, en Lara, protestaron para exigir el derecho a la alimentación y denunciar presuntos maltratos.
Familiares aseguran que las internas tienen más de un mes sin recibir suministro regular de alimentos y en algunos momentos reciben comida en estado de descomposición.
Carolina Girón, directora del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), informó que recibió varias denuncias sobre el anexo femenino de Fénix Lara, en las que señalaban que las internas tiene más de un mes con suministro irregular de alimentos.
Girón, abogada y defensora de derechos humanos, detalló que las reclusas de Fénix Lara reciben solo uno o dos tobos de agua cada ocho días, los cuales deben rendir para su aseo personal, limpiar el área donde se encuentran, lavar el uniforme y ropa interior.
De la misma forma se conoció que estas mujeres pasaron hasta tres meses sin acceso a jabón o toallas sanitarias, por lo que rindieron como pudieron una donación que les llevó la Cruz Roja.
En ese sentido, Girón exigió el cese inmediato de las vejaciones a las que son sometidas las privadas de libertad al no tener acceso a insumos básicos para una vida digna, además del suministro adecuado de alimentos y una investigación veraz y exhaustiva sobre las denuncias por maltratos.